Episode Transcript
[00:00:01] Speaker A: Mutación es el eco de historias que revelan cómo Cristo convierte el dolor en propósito y la prueba en testimonio.
[00:00:08] Speaker B: Porque donde hay un encuentro con Dios se producen grandes transformaciones y la vida cambia para siempre.
[00:00:16] Speaker A: Bienvenidos a todos a otro podcast de Mutación. Hola Mica.
[00:00:21] Speaker B: Hola, Ter, ¿Cómo estás? Un gusto compartir este nuevo capítulo, un.
[00:00:25] Speaker A: Capítulo muy especial para nosotros. Este les diríamos que movilizante, nos lleva muy de cerca, pero es necesario este capítulo porque vamos a estar hablando un poco sobre el duelo.
Y quiero así rápidamente introducir. Bienvenida, Ani, antes que nada.
[00:00:47] Speaker B: Hola, Ani.
[00:00:48] Speaker A: Ani, nuestra gran amiga, una hermana.
Queremos poner un poquito en contexto de qué vamos a estar hablando.
Todos los 20 de julio en Argentina se festeja el Día del Amigo. No sé si en otros países también, pero en Argentina se festeja el Día del amigo. Y hace dos años, particularmente en el año 2023, fue un año muy distinto, fue un festejo, entre comillas, diferente, que cambió la vida tuya, Ani, para siempre. Y nos gustaría que nos puedas contar qué pasó ese día.
[00:01:22] Speaker C: Sí, así como lo están diciendo, el 20 de julio del 2023 íbamos camino a festejar el Día del Amigo con mi marido Elías y Bauti, mi hijito. Y lo que se supone que iba a ser una cena de festejo, de encuentro, de compartir, terminó siendo la peor noche de mi vida, porque sufrimos un accidente automovilístico y en el cual, en ese accidente falleció Elías.
Así que pueden imaginarse, fue lo peor que me pasó, porque uno no se espera esas situaciones, ni las tiene en mente, digamos.
[00:02:01] Speaker A: No te las imaginás nunca. No, jamás, jamás.
¿Y ese día te acordás de momentos, de ese momento, de ese viaje?
[00:02:13] Speaker C: Sí, sí, me acuerdo como si hubiese sido ayer. Fue un día bastante especial porque estábamos todos con la previa del cumpleaños de Bauti, porque Bauti cumplía el 21 de julio.
[00:02:24] Speaker B: El día siguiente.
[00:02:24] Speaker C: El día siguiente, exactamente.
Entonces había sido como muy a las corridas, haciendo muchas cosas, ya preparando las cosas del cumpleaños.
El, Eli, esa tarde había tenido también una reunión de ministerio, de la alabanza en la iglesia.
Entonces nos habíamos visto muy poco porque habíamos ido a trabajar, después él se había ido. Nos encontramos un momento, él se fue y cuando él termina su reunión, viene a mi casa a buscarme para ir a este encuentro de juntarnos con nuestros amigos.
Y bueno, fue un trayecto que hacemos prácticamente de los siete días íbamos cinco a Malvinas, así que bueno, íbamos en el auto, en eso que íbamos en el auto decidimos pasar antes por mis suegros a buscar los muñequitos de la torta, todo hablando así.
Y lo que más me impactó, me acuerdo y que lo tengo tan presente, es el hecho de que todo fue en un abrir, cerrar de ojos, yo ir al frente, mirando el frente y de golpe encontrarme desorientada, tirada en el auto, sin saber qué estaba pasando, o sea, no sentí un impacto, no hubo nada raro, no hubo golpes, fue como estar mirando al frente y de golpe estás tirada en el auto sin entender qué está pasando y rodeada de gente.
[00:03:49] Speaker A: Porque de repente gente se acercó a ayudarte.
[00:03:52] Speaker C: Sí, sí, sí. Yo me despierto claramente, parece que perdí la conciencia, pero me despierto y había mucha gente alrededor, yo escuchaba que me decían que me iban a sacar del auto, que no me preocupe, que mi hijo estaba bien, y yo a todo esto veía la mano de Elías al lado mío y yo le gritaba, le hablaba y no me respondía, entonces era como que no, hasta que te orienta en lo que está pasando, porque no te das cuenta. Y después todo eso de que te sacan del auto, millones de cosas en la cabeza y ahí nomás me sacan para subirme a una ambulancia.
[00:04:32] Speaker B: Bauti cumplía tres.
[00:04:33] Speaker C: Bauti cumplió tres años.
[00:04:34] Speaker B: ¿Y ustedes cuántos años tenían?
[00:04:37] Speaker C: 31 los dos.
[00:04:38] Speaker B: 31 años.
¿Que fue quizá lo primero que sentiste o pensaste, si es que te acordás, en el momento que te enteraste lo.
[00:04:47] Speaker A: Que había pasado con Elías?
[00:04:49] Speaker B: Sí, sí, sí, porque en ese momento de shock, de conmoción.
[00:04:53] Speaker C: Si, yo me enteré un poco tarde, porque a todo esto que me sacan del auto nadie me decía ni qué había pasado, entonces yo me enteré cuando yo ya estaba en la clínica internada, digamos, para control, me enteré como las 5 de la mañana, me parece, pero bueno, es como que en todas esas horas uno va como viendo cosas, pero bueno, hasta que no te lo confirman no tenés la mínima esperanza, ¿Viste?
Pero lo primero que pensé cuando me confirmaron la noticia era ¿Por qué?
¿Y por qué hoy?
Creo que era mi mayor pregunta, ¿Por qué hoy, como el día del cumpleaños de Bauti, iba a ser el día donde se fue Lely?
No entendía y era mi pregunta ¿Por qué hoy? ¿Por qué hoy, por qué hoy? No entendía realmente fue muy fuerte eso.
[00:05:50] Speaker B: A partir de ese día cambió tu vida radicalmente, para siempre, drásticamente a partir de esta tragedia.
Pero antes de indagar un poco más en eso, quizás estaría bueno construir un poco cómo era tu vida previa al accidente, pensando cómo estaba compuesta tu familia, contanos cómo era la vida antes, si tenían planes, proyectos.
[00:06:12] Speaker C: Sí, nosotros con el élite llevábamos seis años de casados, nos casamos en el 2016.
Puedo decirles que mi vida con el Elias era muy intensa, era muy intensa, muy activa, íbamos a todos lados juntos, servíamos juntos, fuimos muy compañeros, muy, muy muy compañeros. Estuvimos cuatro años sin bauti. Bauti vino en plena pandemia y la verdad que, o sea, vida de familia fueron tres años que fueron muy lindos, aparte porque en esa época de pandemia tanto Lely como yo nos habíamos quedado sin trabajo, entonces fue compartir mucho tiempo juntos y afianzarse más como matrimonio, como amigos. Yo siempre digo que Lely es mi mejor amigo, era mi mejor amigo, entonces muy compañeros en todo. Y el Eli me tenía el trote, era como el trote. Yo me acuerdo que ese día del amigo estaba como un poco cansada porque habíamos estado con con todo el tema del cumpleaños, él había vuelto de la reunión y vamos, vamos que nos va a ser bien, decía, vamos que nos va a hacer bien, salir con los chicos.
[00:07:21] Speaker A: A él le hacía bien salir, a.
[00:07:22] Speaker C: Él le encantaba salir, no había que parar un poco. Hoy creo que uno ve más cosas, no quiero decir que fue perfecto porque todos tenemos cosas, pero la verdad que mi vida con Eli fue hermosa, Lely súper atento, muy buen compañero, muy buen amigo, muy buen esposo, muy buen padre.
Si me tenía el trote y que yo a veces era como para un poco, pero bueno, yo iba igual o a veces decía paremos un poco. Pero fue una familia muy bien constituida, puedo decirlo, porque siempre Dios estuvo como en el centro de nosotros. Y el Eli recuerdo que siempre, incluso antes de ponernos de novios me decía yo quiero servir a Dios, ¿Vos me acompañas en esto o te bajas?
Era como bueno, si vamos manejar una intensidad, tener una intensidad, si tenemos proyectos por supuesto, queremos agrandar la familia, uno a ver, piensa en viajes, comprar una casa, como todos, me parece.
[00:08:26] Speaker B: Totalmente. Y ahora, respecto previo al accidente, ¿Había atravesado alguna situación de dolor? Quizás también. Yendo nomás a tu infancia, ¿Cuál fue tu experiencia más cercana a una muerte o si habías pasado por algún proceso de enfermedad, de dolor que te había marcado previo a esto?
[00:08:44] Speaker C: Sí, así de este índole nunca puedo decir, fue creo que la prueba más grande que me tocó atravesar, pero sí me ha pasado, de niñas tuve esto de tener que mudarme de provincia, que fue re fuerte, que bueno, gracias a eso también conocí a Lely y después bueno, puedo decir que tuve una infancia muy linda, que otra cosa fuerte fue también que mi mamá le diagnosticaron cáncer de mama, o también ya de casada, quedarnos sin trabajo los dos, fue como.
Son esas cositas que marcan, que te tocan, pero como esta situación nunca me tocó vivir, ni siquiera la tenía en mi mente, creo que como todos tenemos temores, tenemos miedos de que. Y sabemos que pueden llegar a pasar, pero nunca uno.
[00:09:34] Speaker B: Es cierto, sabemos que somos frágiles, pero uno no planifica la muerte claramente, ni.
[00:09:39] Speaker C: Un accidente, o sea, uno ve, veía noticias, cosas feas que pasan, que pueden pasar, nadie está exento a eso, pero nadie se pone a pensar me puede tocar a mí, pero si te puede tocar ahora.
[00:09:53] Speaker B: Abocados a partir de este trágico día, ¿Que cambió? ¿Cómo fueron esos primeros días, Ani?
¿Cómo se dividía el corazón? ¿Quizá entre la tristeza, pero también sabiendo que estaba el Bauti, había que seguir?
[00:10:10] Speaker A: ¿Perdón, antes de entrarnos a esa pregunta, porque hay una pregunta que estoy pensando en este momento, que viene un poco antes, pero es el 21 de julio cumple Bauti?
¿Cómo de repente feliz cumple, pero pasó esto? ¿Cómo se enfrenta eso?
[00:10:32] Speaker C: No, yo claramente ese día no fue nada de festejo, uno está muy abocado en eso, pero sí tuve mucha familia, mucha gente a mi alrededor que se ocuparon de Bauti ese día, quizá Bauti en sus tres años no entendía que era su cumple, pero bueno, ese día yo recuerdo haber llegado a casa y había globos para Bauti, había globos que los recibían después, bueno, creo que más tardecita, antes del velorio, porque ese día fue el velorio, lo habían llevado a comer a McDonald's, a ir al velotero, entonces esas cosas, es como que los de mi alrededor se ocuparon de Bauti porque yo no había forma, no podía.
[00:11:12] Speaker A: Claro, claro. Aparte tener en cuenta que había sido un accidente y vos también estabas shockeada del mismo accidente, incluso ahora.
[00:11:21] Speaker B: Sí, disculpame, quizás rompiendo un poco también esta formalidad de entrevista, como tanta profesionalidad, lo hemos vivido todo de cerca y nos ha pegado todos. Creo que quizá el dolor más grande te tocó atravesarlo a vos, entonces por ahí compartinos un poco Ani, cómo fueron esos primeros días para vos, si bien nosotros hemos estado viendo y todo este tiempo, pero que puedas compartirnos eso, cómo fueron esos primeros días pensando en esto que decías recién de cómo se divide en corazón entre tenés que atravesar el duelo pero también tenés al Bauti que como decía ter, cumplía años. ¿Cómo lidiaste con esto?
[00:12:01] Speaker C: Sí, fue todo como un proceso y muy el día a día. Yo aprendí a vivir un día a la vez, no podía proyectarme en la semana ni en el día siguiente, no había formas, eso era como ocuparme del día.
Sí, me acuerdo que digamos como para empezar la vida así, llegamos del entierro y yo lo agarré al Bauti, el Bauti en swing, lo chiquito que era, y yo le dije, yo siempre opté por decirle la verdad al Bauti y le dije mira Bauti, papá no va a volver, pero nosotros íbamos a ir donde está el papá.
Fue como de entrada contarle lo que estaba pasando y lo que vamos a empezar a vivir, porque si bien él era chiquito, no hablaba del todo, pero si preguntaba por su papá, entonces era como de entrada eso y fue muy difícil, no les voy a mentir, fue muy difícil.
Uno a veces en esos momentos de dolor realmente quiere estar en la cama tirado, durmiendo, pero el boutín no me dejaba, el boutín no había forma que me deje estar en la cama. Sí me ayudan mucho mis papás que vivíamos en el mismo edificio, me lo llevaba, me lo traían amigos, me lo buscaban, pero fue como, me acuerdo que se levantaba temprano, es como nunca se levantaba a las siete, a veces seis y media y ya era, o sea se levantaba para arrancar el día y era como una lucha, pero por el bautic uno yo tenía que hacer, o sea no me podía quedar, yo en mi mente tenía esto de sobre que ya estamos pasando un momento muy feo, no quiero cargarle más dolor. Claro. Entonces era como sacar fuerza de donde no tengo y levantarme y jugar y estar.
[00:13:56] Speaker A: Realmente. Sentías por momentos que sacabas fuerzas, no tenías.
[00:14:01] Speaker C: Sí, sí, esta responsabilidad de madre que uno tiene de que se tiene que levantar porque tu hijito te pide la leche o porque te dice levántate o porque llora porque quiere ir al baño, estábamos en proceso también de los pañales, entonces como sí o sí tenía que levantarme y creo que también en cierta manera eso a mí me ayudó mucho porque es muy fácil quedarse en la cama llorando, deprimido, es muy fácil, muy cómodo y que no te requiere digamos más esfuerzo, porque todo lo que haces es esfuerzo y que no está mal.
[00:14:36] Speaker B: También llorar, tener el tiempo de duelo.
[00:14:39] Speaker C: Por eso ahí tenía mi familia que se lo llevaba por ahí un tiempo.
[00:14:43] Speaker A: ¿Necesitaba estar sola?
[00:14:44] Speaker C: Si, necesitaba estar sola. También me pasó que esto con mucha gente, mucha gente me quería venir a visitar, me quería ver y a mí me hacía bien también porque el estar sola era muy feo, porque ustedes. Bueno, como dije, el era muy intenso, era muy ruidoso, había mucho ruido en la casa y de golpe ese ruido ya no está más, entonces eso sí me chocaba mucho, pero bueno, necesitas, o sea necesitaba para estar quieta, para estar en la cama, para dormir, porque también ese tiempo para mí era quiero cortar el día de una u otra forma, entonces buscaba la forma de acostarnos temprano y bueno nos levantábamos, yo me levantaba temprano para ir a trabajar, entonces como buscas la manera, pero para vivir ese día no me ocupaba del día siguiente, un día, un día a la vez y con eso me bastaba.
[00:15:43] Speaker A: ¿Te pregunto qué fue lo más difícil para vos en este atravesar el duelo?
¿Qué es lo más difícil?
Estoy tratando de pensar una persona que está pasando por duelo, que te escucha, ¿Qué fue para vos lo más difícil?
[00:15:58] Speaker C: ¿Para mí lo más difícil fue aprender a vivir sin el Eli, porque el Eli digamos, teníamos toda una rutina, toda una forma de vida, yo era muy dependiente de Lely, yo descansaba mucho en él, realmente fue aprender a vivir como de cero para mí, porque se corta todo drásticamente en un abrir, cerrar de ojos y lo que ya tenías no? Es más, uno cuando va a un entierro y deja una persona que amas, no solamente enterrás una persona, yo no solamente dejé a la Elías, yo dejé muchas cosas atrás, entonces es como de cero aprender, yo no sabía manejar, o sea es como que volvió toda mi.
Yo sentí que volvía una dependencia más que nada de mis papás porque estaban cerca cuando antes era mi vida con el Eli fue como todo retroceder de no saber qué hacer, para dónde ir, que cómo me muevo, porque las actividades seguían. Entonces muchas cosas que tuve que aprender. Y si vos me preguntas a mí cuál fue el momento, así los puntos más claves. Para mí los peores momentos era cuando me levantaba la mañana, porque era no verlo en la cama y eso a mí me confirmaba que Lely no estaba.
No era tanto irme a dormir sin el, era tanto despertarme y no verlo porque era uy, un día más tengo que vivir sin Eli. No, o sea, ese era mi un día más tengo que resistir, un día más tengo que ver cómo afronto el día o lo que se venga.
[00:17:39] Speaker A: ¿Eso fue en algún punto te viste sobreviviendo?
[00:17:43] Speaker C: Sí, al principio me preguntaban porque te preguntan cómo está sobreviviendo, cómo puedo sí no era.
[00:17:52] Speaker B: Y las fechas especiales, pienso, cumpleaños, aniversarios, Navidad, cumpleaños. Costaba.
[00:17:59] Speaker C: Sí, a ver, todo ese primer año que es todo nuevo, cuesta por supuesto, porque lo que era ya no es más. Y para mí particularmente lo que más sufría era la previa, una semana antes de que ya llegue ese día.
Entonces yo ya me imaginaba qué voy a hacer y cómo va a ser. Porque también ese entorno triste, porque es triste todo, toda esa previa, toda esa semana antes de cualquier fecha, sea cualquiera, me era muy fea, pero ese día siempre Dios me sorprendía. Es como que uno creo que se hace muchas expectativas de lo feo que es. Y es triste, no digo que no es triste, pero me cargué tanto en la semana que creo que ese día fue como bueno, pasó, esto ya pasó y el día este que me angustió ya pasó, así que voy.
[00:18:55] Speaker B: Creo que tiene un tinte más dramático el hecho de uno no planifica porque no lo puede hacer y la inmediatez en la que sucede, porque quizás si hubiese sido una enfermedad, hubiese sido una cuestión. Uno de alguna manera su mente va pensando cómo va a ser esa nueva vida. Pero de repente cuando, como Hawk que dice, aconteció un día te encontraste con esta nueva realidad.
Y pensaba en cómo quizás acompañar a Bauti ahora sola en un acto del colegio, ocupar el rol de madre padre, ¿Cómo fuiste equilibrando esta nueva?
[00:19:34] Speaker A: ¿Cómo enfrentaste ese desafío?
[00:19:36] Speaker C: Sí, al principio me costó mucho, me costó mucho porque no sabía cómo abordar.
Viste que en uno de estos de la crianza también los quiere cuidar, pero bueno, a la vez estar ahí atenta, que no se mande sus mocos, enseñarle, criarlo, fue un día a la vez. Y yo puedo dar fe y gracias, porque el Bauti es un niño muy entendido. Para mí Dios también me hizo Bauti muy especial, porque él desde el minuto cero, si bien él preguntaba, él entendía lo que estaba pasando.
Entonces digo que él me la hizo muy fácil, el Bauti me lo hizo muy fácil y fue como. A ver, al principio sí costaba, porque el que ponía la autoridad en casa era Lely y de golpe, o sea, era Bauti acá yo te lo estoy diciendo, lo tenés que hacer porque esto es así.
Creo que a él le costó eso y a mí también como ponerme en esa posición.
Y bueno, hasta que uno.
Creo que entre los dos fuimos armando ese vínculo muy especial y donde ya nos entendemos.
El Bautista con la mirada ya sabe.
[00:20:50] Speaker A: Pero es cierto que a los que conocemos a Bautis es un niño muy dócil, es un niño que no pelea, que no es caprichoso. La verdad que. Y sin lugar a duda Ani, es algo que Dios lo hizo de esa forma, porque sabía que Dios sabe todas las cosas.
Y creo que hubiese sido un poco más difícil el proceso de duelo si de repente hubiese sido un niño rebelde o totalmente caprichoso.
Realmente es un niño muy especial. Ahora, en medio de todo este dolor, ¿Qué es lo que te sostuvo a vos?
[00:21:26] Speaker C: En principio, yo a Dios lo tengo en mi vida desde niña y yo puedo dar fe de que Dios a mí me sanó, el corazón me sigue sanando y la esperanza de volver a reencontrarme con el Eli el día de mañana, para mí fue muy sanador. Es muy sanador porque uno tiende por ahí y con esto luchado mucho con que esto es el final, acá se terminó. Pero la realidad es que para los hijos de Dios no es el final.
Quizás el final acá en este plano, pero yo sé que hay una esperanza, yo sé que hay un cielo, yo sé dónde está Lely, yo sé que yo voy para allá.
Entonces eso a mí me sostuvo mucho. Y más allá de eso también es ver a Dios en todo.
Hasta les puedo decir en el mismo occidente que detrás nuestro venga una ambulancia, porque pasaba, porque volvía, venía una ambulancia que nos tuvo que socorrer. Esos detalles que uno quizás por ahí lo pasa desapercibido, pero para mí son muy presentes palabras que Dios me daba hermanos, familia, muchas cosas que estuvieron siendo como mi muleta en este tiempo, que estuviera como dándome ánimos.
Y sin duda es correr a Dios para mí.
Yo creo que en momentos de dolor siempre uno busca algo y siempre uno corre a algo. Yo no tenía otra opción en mi mente que no sea correr a Dios, con mis dudas, con mis preguntas, mis cuestionamientos, incluso a veces esto de no entender lo que está haciendo.
Para mí no había otra opción, era a Dios que yo tenía que ir porque me diga qué está pasando, me diga cómo salir adelante, me diga cómo llevo a Bauti en esto me ayuda a salir adelante.
[00:23:27] Speaker A: Se me viene a la mente el texto este cuando Pedro le dice Jesú ¿A dónde más iremos? Solamente tú tienes palabras de vida eterna. Y realmente hay momentos donde son críticos en la vida de uno.
El tuyo es muy particular, la verdad.
Y hay momentos que decí no tengo otra que ir a vos, porque no tengo otra.
[00:23:49] Speaker C: Algo que a mí me marcó mucho es que mucha gente te daba palabras.
Me mandaba textos bíblicos y había uno en particular que me lo mandaban mucho, que está en Isaías 54, que Yo soy tu hacedor, tu marido.
Y yo era como que decía Señor, todo bien con vos, Yo sé que vos vas a ser mi marido, yo sé que vos hoy vas a ocupar el lugar de Lely. Yo decía, pero vos no sos el todo bien, pero vos no sos.
Y en esa pregunta que yo hice, no recuerdo si fue en ese momento o si fue en los días, pero yo sentí muy claramente la voz de Dios diciéndome todo bien, yo no soy el Elías como vos decís, pero el Elías no hubiese sido lo que fue si no fuera por mí.
Y eso fue como decir Señor, gracias y a la vez perdón. Porque es cierto, el Eli todo lo que fue para mí fue porque tenía a Cristo en su corazón, porque ponía a Dios en primer lugar en todo, en todo.
Y eso fue como también un quiebre de decir bueno, está bien, no lo perdí todo. Porque todo lo que era el Eli vino de Dios primeramente y hoy es Dios conmigo.
El Eli quizás era la persona que me ayudaba a acercarme a Dios, que me guiaba, que me corregía, que me animaba. Y al no tenerlo estoy yo.
Era por mi cuenta el buscar a Dios.
[00:25:30] Speaker B: Bueno, hay un salmo muy conocido que dice que es padre de huérfanos y defensor de viudas. Y luego dice que hace habitar en familia al desamparado ¿Y cómo experimentaste a ese Dios que no todos pueden vivir, al defensor de viudas y no lo podemos experimentar todo? ¿Cómo lo viste Dios en ese nuevo rol, en ese nuevo tributo, en esa faceta?
[00:25:53] Speaker C: Fue impresionante porque Dios se encargó de tantas cosas, tantos detalles.
[00:26:01] Speaker A: ¿Te acordás así? ¿Alguno específico que puedas compartir?
[00:26:04] Speaker C: Sí, muchos. Me puedo acordar. En primer lugar fue el tema del departamento, nosotros habíamos en marzo de ese año nos habíamos embarcado en esto de comprar un departamento y ese mes julio habíamos, ya estábamos por el momento del tasador, ya estábamos en ese paso final y bueno, pasa esta situación, Elías fallece y yo ya no tengo cómo seguir adelante con esto porque ya no tengo ese respaldo económico que era de los dos juntos.
[00:26:38] Speaker A: Claro, ibas a sacar un crédito.
[00:26:40] Speaker C: Claro, íbamos a sacar un crédito y ya lo estábamos en la parte final y bueno, pasó realmente lo de Lely y yo en mi dolor es como que lo dejé de lado, pero hubo gente a mi alrededor que se ocupó de eso, que me ayudó en eso, se me dio, me lo dieron.
Que para mí un milagro eso en este momento si, yo no lo veía quizás como algo muy feliz porque era algo que uno esperaba con él, o sea se había imaginado ese crédito con él, Pero a ver, te digo vacaciones, que no digan vamos, nos vamos de vacaciones.
Yo en eso vi a Dios como diciéndome vos ocúpate de mí, de sanarte, yo me ocupo del resto, yo lo.
[00:27:25] Speaker B: Viví así, Yo te defiendo.
[00:27:27] Speaker C: Sí, yo me ocupo, yo te defiendo.
Sé que estás dolida porque sé que Dios también ve eso.
[00:27:36] Speaker A: Anda, sobre eso de que estás dolida, te pregunto, ¿En algún punto te enfrentaste con Dios? ¿Qué pasó acá? Yo te fui fiel, yo soy hija tuya. De enojo, de resentimiento, plantearle preguntas a Dios, cuestionando.
[00:27:54] Speaker C: Yo me levantaba mucho las madrugadas, no podía dormir de corrido y me levantaba, me acuerdo las noches y me iba al comedor y me ponía a orar y muchas veces le señor, vos con esto vos me lastimaste, vos me heriste, quiero que sepas que vos me dist.
Pero Dios en su gracia no es un Dios que se aleja, ni que dice uy, está otra vez con lo mismo, sino que es como que me recibió así y me tomó así y me dijo yo te voy a vender, yo te voy a cuidar, yo te voy a sanar.
Y como les decía, yo corrí a Dios porque no tenía otra opción en mi mente no había otra opción y nunca llegué a enojarme con Dios, porque creo que cuando una persona se enoja, toma una postura de bueno, ya no quiero saber más nada con vos. ¿No es lo mismo, no? Era como. Si bien no entendía lo que estaba haciendo, pero yo necesitaba que me diga algo, necesitaba alguna respuesta, necesitaba que.
Necesitaba ver que estaba conmigo a pesar de todo esto.
[00:29:04] Speaker B: Bueno, desmitificando un poco la cuestión de no se le puede preguntar a Dios, no podemos llorar, Pregúntate en vez de por qué, ¿Para qué?
Creo que está bien preguntarle ¿Por qué, ¿Para qué? Y a quién más sino derramar tantas dudas, preguntas, dolor. Pero cuando decís no había opción, en realidad sí había muchas opciones. Pero vos decidiste que no haya otra opción.
[00:29:31] Speaker C: Sí, sí, sin duda hay más opciones, pero en mi mente no había otra.
¿Era como corro Dios, así como estoy rota?
Yo creo que en cierta manera uno no quiere pasar por procesos de dolor y los valles, digamos, los tiempos de dolor no los podemos saltear, los tenemos que pasar.
Me acuerdo también que a una amiga le dije a la Emi, muchos la conocen a Emi, le digo a Emi ¿Cuánto dura el duelo? Porque yo estaba ahogada, sufría tanto que necesitaba que se pase y me el duelo suele durar de dos meses. Y mi cara fue como dos meses, bueno, a dos años.
Y cuando me hice dos años fue como un balde de agua fría, porque dije dos años sufriendo, dos años pasándole mal, dos años llorando, dos años.
Entonces fue ahí como en mi mente decir bueno, no me puedo saltear esto, tengo que pasarlo y tengo que ver la forma de pasarlo de la mejor manera.
Y para mí la mejor manera era con Dios, por eso digo que no tenía otra opción en mi mente, porque entiendo que hubiese sido más doloroso pasarlo sin Dios, entonces quería hacer como el camino un poco más apacible, tanto para bauti Para mí hubo cosas que.
[00:31:04] Speaker A: En tu duelo hubiese sido justificable que dejaras de hacer y que no, no lo voy a dejar de hacer esto. Por más que estés aceptado por decir así. Hubieron cosas que tuviste que decir no, yo esto lo voy a seguir haciendo porque no voy a volver atrás con esto.
[00:31:21] Speaker C: Sí, sí, digamos, el servir a Dios quizás no lo hice de inmediato, pero sí recuerdo que al mes ya volví, volví a la iglesia. Me acuerdo también de que muchos creyeron y me lo decían, de que yo no iba a volver a la iglesia porque claramente no estaba Lely, quizás iba a ser doloroso, pero. Pero yo decía, yo en mi mente y en mi corazón ya tengo decidido volver a la semana, por ejemplo, a la semana esté como esté en esto del servicio que les decía, estamos en un grupo de sanidad y restauración, que las chicas, digamos en el equipo me recibió ese tiempo en el equipo y fue realmente hermoso, doloroso también porque es servir ya a Dios sin el Eli y quizás en otra cosa que no estaba con el elija, pero fue muy necesario para mí, esas cosas me ayudaron a avanzar, porque como esto está de es muy fácil quedarse en la cama, pero yo necesitaba también compartir con otros, compartir mis cargas, orar con otros que me contengan, el salir también de mi casa, de ese espacio que antes era ruidoso y ahora silencioso, entonces me hacía bien seguir la vida.
[00:32:42] Speaker B: ¿Qué rol jugó justamente la iglesia, amigos, familia en este proceso?
[00:32:47] Speaker C: Y fue fundamental porque muchos, muchos, tanto mi familia como la iglesia, que realmente fue una familia, hicieron cosas que yo no podía pensar, que yo no me podía encargar en ese momento, con decirte, con la comida simple, cosas que en ese momento ni las pensaba, pero venían hermanas con un tenían organizado y me llevaban comida para la semana, entonces yo no tenía que pensar en eso.
Con los pañales de bauti vinieron también, me proveían de cosas que necesitaba para bauti, cosas que ni siquiera las pedía, pero estaba ahí la iglesia para contenerme, que me venían a visitar, a merendar conmigo, a preguntarme cómo me podían ayudar, muchas cosas de la iglesia, una iglesia muy activa, de abrazarme, de estar, darme los pañuelitos, mucho en eso voy a la iglesia y mi familia sin duda estuvo ahí pendiente de nosotros y eso también es algo que ayuda, que suma, sin duda ayuda.
[00:34:00] Speaker A: Ahora pienso, ya pasaron dos años, ¿Cómo es tu vida hoy sin Eli?
[00:34:09] Speaker C: Sí, y hoy mi vida quizás es un poco más, o sea, hoy puedo decir que estoy un poco más resuelta de lo que eran estos dos años que tuve que pasarla.
Sí puedo decir que lo que yo era con el Eli era una cosa y a partir del accidente que tuvimos, Dios a mí me hizo otra.
Me cambió mucho la mente de esto del realmente que somos instantes, que es el Mica, yo puedo decir que soy otra versión. Y es algo que me acuerdo muy fuerte, porque a principios del año 2023 yo había hecho una oración y le había dicho a señor, yo no quiero terminar el año como estoy, yo quiero que haga una transformación en mí, porque sabía que había cositas por mejorar. Y cuando pasa esto de Lely, es como que todo lo que yo era ya no es más. Entonces reconstruirme de nuevo.
¿Te acordás de esa oración? Me acordé de esa oración, sí. Y la tengo escrita. Yo la había escrito ese 2023. Me pongo a escribir, escribirlo, y después me acuerdo eso y digo fue por mi oración.
Pero no, es como todo. Dios fue hilando ese deseo con lo que iba a pasar.
Y hoy, gracias a Dios, la que era no soy más. Yo hoy tengo otra mente, tengo otro.
Otro. Puedo decir sentido, porque uno creo que acá está muy aferrado acá este mundo.
Y hoy puedo decir que puedo vivir un poco más liviana en eso. Ya también el hecho de la rutina, de tenerla más resuelta, me ha ayudado muchísimo a salir adelante.
Esto de que me costó mucho aprender a vivir sin el Eli. Hoy ya sé más o menos cómo es, con qué cosas me puedo llegar a encontrar y cómo resolverlas.
[00:36:16] Speaker A: ¿Ya está más la rutina tuya habituada a esta nueva dinámica?
[00:36:22] Speaker C: Es difícil, sí, a veces sí.
No voy a decir todos los días, porque hay momentos. Hay momentos, por supuesto.
Es difícil quizás cuando una tarea que se supone que es de dos, la tengas que hacer vos sola.
Pero como digo, yo no estoy sola, tengo mucha gente a mi alrededor que me acompaña, que me ayuda, que.
Que me asiste.
Tengo mucha contención, Mucha contención.
Como dije, el bouting me la hace muy fácil. Entonces ya esta dinámica familiar ya está acomodada, por así decirlo. Y la llevamos bien, La llevamos bien.
[00:37:02] Speaker A: ¿Y cómo hacés con el Bauti para mantener como vivo el recuerdo de su papá?
¿Cómo llevas adelante eso?
[00:37:11] Speaker C: Y el Eli está muy presente en nosotros en sí, desde el minuto cero.
Yo quiero que el Bauti lo tenga presente. Y lo tiene muy presente él solito.
Es muy gracioso porque a veces en su inocencia viene y mamá, el papá se olvidó de llevarse el celular, se lo vamos a llevar cuando vayamos al cielo.
Él lo tiene muy presente.
Son cositas que él va viendo, ¿No?
Y bueno, fotos y canciones. Nosotros tenemos muchos registros de videos, porque Lely le encantaba, se filmaba, ella sacaba fotos cantando, hay muchos registros de Lely y bueno, eso también lo ayuda. Y yo al Bauti le digo mucho esto es como tu papá, o soy igual que tu papá en esto.
[00:38:05] Speaker A: A.
[00:38:05] Speaker C: Tu papá le encantaba hacer esto y eso en él veo como le gusta saber cosas de Lely, y a mi papá le gustaba esto, y mi papá qué hacía esto de tu papá era tan gracioso así que decía esas cositas.
Le da curiosidad. Sí, o a veces le digo ay Bauti, le digo respondes como tu papá. ¿Y que decía?
Y aparte le hace bien saber que se identifica con él.
Yo me doy cuenta de eso, decir mira, hago como mi papá.
[00:38:44] Speaker A: Desde el primer momento.
La palabra Eli, viste que hay como.
Hay situaciones donde de repente no lo nombras más porque no vamos a decir.
[00:38:55] Speaker C: La palabra Papá ni Elías, porque creo.
[00:38:58] Speaker A: Que nunca pasó eso.
De repente decir Elías no es una palabra censurada. ¿No, por supuesto, se habla y creo que eso también es sanador, porque sería peor si de repente fuera una palabra que no se puede decir, no? ¿Hablemos de Elías acá o no? Es muy natural hablar de Elías, muy.
[00:39:20] Speaker C: Natural hablar de Lely. En mi caso por lo menos sí está siempre, aparte está en fotos, está en esos vídeos. A veces el Bautista me dice quiero ver videitos del Papá, listo, vení, vamos a verlo. No tanto, al principio era como no podía tranqui, pero si le hacía ver, nunca le denegué no ver nada, siempre si me decía bueno, vamos a ver si a mí me hacía mal, por ejemplo, bueno, vemos dos o tres nada más, pero nunca negarle saber cosas de su papá o incluso qué pasó, porque él también se pregunta por qué no va a volver, Entonces ya hoy no es tanto esas preguntas, pero en un principio sí, entonces yo quería que esté todo, no generar en él cosas que él no pueda saber, sino realmente en su inocencia, en su edad, explicarle con sus palabras.
[00:40:10] Speaker B: Totalmente. Ha sido clave tu impronta hacia él en cuanto mirar hacia adelante con el recuerdo vivo pero con alegría. Creo que esta esperanza que vos nombraste un día lo vamos a volver a ver de alguna manera en su pequeña mente también es súper pequeña, pero en su inocencia, él abrazó, esta idea de esa esperanza y se lo ve alegre y se lo ve muy feliz. Creo que tiene que ver parte por el punto de la esperanza de volver a verlo.
[00:40:38] Speaker C: Totalmente. Que no es el final digamos.
[00:40:40] Speaker A: Y no es una.
No es una pal. No es algo que decimos ya lo vamos a volver a decir como bueno, consuelo, premio consuelo, sino que es realmente algo que creemos que eso es importante. No es que es un consuelo y listo, sino que lo creemos que un día vamos a volver a encontrarnos todos juntos.
Y los niños tienen mucha fe. Nosotros hemos escuchado conversaciones de otros niños junto con Bauti ¿Dónde está tu papá? Y él con total naturalidad en el cielo. ¿Como no te enteraste todavía de eso? ¿Viste? Y no, pero es para aprender porque a veces pueden venir desánimos, tristeza.
Pienso en el y pienso en quizás las personas que están escuchando este podcast de que se te viene alguien a la mente que has perdido.
Nosotros tenemos la certeza de que los hijos de Dios tenemos una eternidad con Cristo y están con Cristo en este momento y nos vamos a encontrar con ellos. Y eso realmente es una. Y ver colmo eternamente no es un consuelo.
Es en serio lo que creemos.
[00:41:53] Speaker B: Si. ¿Dijiste Annie, que cambiaste, que no sos la misma, que tu mente cambió en qué? Cómo. Cómo era la ni previo a ese día, ¿Como es la hoy dos años después qué cambio?
[00:42:07] Speaker C: Y puedo decir muchas cosas. Yo sé, si tengo que dar una descripción de mí, yo me considero que fui una persona muy insegura, muy insegura, súper materialista.
Me aferraba mucho lo que quería acá.
Cero, cero. No quiero decir cero, pero casi nula la visión de cielo.
Porque uno planea hacer sus planes acá.
Uno lo tenía como eso algo lejano y no está haber incluso con el Eli estaba compañeros. Y yo soy una persona que tiende a apoyarme mucho en otros, en que me digan prácticamente qué hacer. Casi. Y a Lely le preguntaba si hasta qué ropa comprarme.
Hasta en eso mínimo hacer un cambio de decir tengo que moverme por mí misma, aprender a esto de la dependencia total, pero con Dios. Ya no es alguien que me está diciendo y tuviste tu tiempo con Dios hoy o que te habló hoy este día el Señor fue como muchas cosas que se han roto y hoy digo, para mí es fundamental vivir así como hoy estoy, no aferrado a este mundo. Con la partida de Lely a mí se me cortaron muchas raíces, muchas, muchas raíces.
Ya no hay una proyección acá, total en la tierra, en aferrarme acá, sino que yo sé lo que hago, sé para quién lo hago y sé para dónde voy.
Y eso libera mucho, libera mucho y te hace el camino más liviano, te hace vivir esto de la libertad de decir realmente lo que hoy tengo, puedo no tenerlo mañana.
Y disfrutar, valorar esas cosas, valorar esas pequeñas cositas que uno se da por hecho que lo va a tener siempre y no puede ser un abrirte error de ojos literal.
[00:44:12] Speaker B: David decía en el salmo 39 sepa yo cuán frágil soy, le pedí a Dios.
Quizás situaciones como la muerte nos hacen recordar la fragilidad, lo efímero que somos, y eso te lleva entonces a tener, no una indisciplina de no planificar nada.
[00:44:32] Speaker C: Pero a ser más consciente de lo que hoy estoy viviendo. Digamos que todo hoy, lo que tengo hoy acá es pasajero, es muy pasajero y a veces uno cree que lo tiene comprado de por vida, y no, no, lo que realmente hoy tengo y valorar, saber valorar lo que hoy tengo, lo que hoy disfruto, porque a veces en el afán de querer detener, de proyectar y que no llega, me corta y me anula las cosas que sí tengo hoy.
Entonces eso a mí también me cambió, incluso en la maternidad, en ser más intencional en mi crianza con el bauti, en lo que realmente quiero impartir, en lo que realmente quiero dejar en bauti, en los que están a mi alrededor, que realmente es lo que estoy dejando, que impronta estoy dejando, como dijiste, ¿Que sello quiero dejar? Si, una Annie que fue que se dedicó acá a este mundo, se proyectó a cosas realmente eternas, porque Lely era una persona que vivía por las cosas eternas, iba, iba por más en eso.
[00:45:40] Speaker A: ¿Hay algún consejo que te hayan dado en un momento donde vos veías como todo mi oscuro que te dio un poco de luz, Menos mal que recibiste este consejo, no se hubiese prendido esta lamparita sola?
[00:45:56] Speaker C: Sí, más que consejo, porque tuve muchos consejos, era como más bajar lo que uno cree. A veces hasta que uno no lo asimila, no lo tiene.
Por ejemplo, vuelvo un poco atrás y esto de decirle que no estaba enojado con Dios, pero le había dicho que me había herido, pero a la vez decirle ¿Por qué me hiciste esto? Y hasta que viene una persona y me dice anis, que esto no te lo hizo Dios.
Elías ya tenía esta fecha escrita.
Y uno es como sí, cierto, no me voy a enfocar en lo que Dios hizo para lastimarme, sino que la Eli tenía esta fecha ya designada para irse de acá.
Y eso a mí como que me hizo también plantearme u otra cosa era siempre yo en mi mente tenía que ya mi familia An y Bauti somos incompletos, porque siempre me va a faltar el Eli, siempre va a estar esta carencia, por así decirlo, de ese padre, de ese esposo.
Pero fue hasta que otra persona, que es Lili Clamo, que me acompaña, me acompaña en este proceso, me hace bajar y me hace entender, Annie, si vos estás diciendo que sos incompleta, que vos y Bautis están incompletos, entonces estás diciendo que lo que Dios hizo está mal, se equivocó. Y fue como abrirme los ojos y decir no señor, yo sé que vos nunca te equivocas.
Siempre hay un motivo, siempre hay un propósito, siempre hay algo que él ve mejor que lo que yo estoy viendo.
Esas cosas que me hacen como entrar en razón y seguir adelante.
[00:47:47] Speaker B: Él hace habitar familia, aún cuando nuestra mente piense que no tenés la familia ideal.
[00:48:00] Speaker C: Exactamente. Porque es esto. Pero esto de ser incompleta porque me falta, es una mentira. Porque si tenés a Cristo, si Dios está en primer lugar en tu vida, tenés todo.
Tenés todo.
[00:48:13] Speaker B: Y a uno es. ¿Encontraste en este proceso difícil, quizás en la victimización, esconderte o tratar de escudarte ahí? Quizás en la victimización uno encuentra más atención, más acompañamiento, más sentirse protegida o más centro de atención. En algún momento esa idea estuvo dando vueltas, el victimizarte. Y me quedo acá en esta.
[00:48:41] Speaker C: Y sin duda es como una.
Uno puede correr a eso y se puede aferrar. Pero en mi caso particular, yo necesitaba como resolver ciertas cosas, porque necesitaba volver a la rutina, necesitaba que todo vuelva a marchar medianamente bien.
Creo que no supe ponerme tanto en ese lugar, porque yo necesitaba salir y más por Bauti. Para mí Bauti era como mi consuelo en la tierra, me dicen algunos. Y el que Dios usó para que yo también me pueda levantar y no ponerme en ese rol. No, porque es muy fácil. A ver, no quiero decir que hubo momentos donde lloraba enfrente del Bauti, y Bauti preguntarme ¿Y por qué está llorando? Y decirle la mamá llora porque extraña al Papá, incluso en eso decirle no, Pero creo que Bauti fue un instrumento usado por Dios para.
Para sacarme de ese lugar de pobrecita de mí, porque yo no quiero ser pobrecita.
No es algo que tampoco como familia el, él y el bautizo hayamos adquirido.
[00:49:51] Speaker B: Correr el dolor del medio y ponerlo a Dios.
[00:49:55] Speaker C: Sí, sí, no es correr quizás el dolor porque lo tenés que atravesar, pero es ponerlo a Dios en medio de ese dolor.
[00:50:02] Speaker B: Hoy, estos dos años que han pasado, ¿Cómo reconvertís el 20 de julio? ¿Cómo reconvertís el 21 de julio?
¿Cómo se reconvierte eso?
[00:50:11] Speaker C: Y la verdad que fue una sorpresa, porque si bien uno dice uy, pobre Bauti va a recordar este día, quizás triste, pero hasta ahora hemos tenido unos cumpleaños súper felices, es más, me acuerdo que el primer cumpleaños que después de la partida de Lely, que fue el año siguiente, yo decidí festejarlo el 20 de julio, no el 21 justo se daban ciertas situaciones, entonces con el consentimiento de la familia de todos, si les parecía y a todos les gustó la idea y me acompañaron en esa idea y fue realmente muy lindo porque siempre decimos que tanto Bauti como yo tenemos dos fechas de nacimiento porque Dios nos dio otra oportunidad, ese día se podría haber ido el Bautista y yo hoy es como que tengo enfocado en esa mente, yo podría estar triste porque no lo tengo bautista, pero no, sí lo tengo. Entonces celebrar su vida es como que toda la previa a lo que lleva ese día del 20 de julio, la verdad estoy tan enfocada en el cumpleaños de Bauti, en festejarlo, en celebrarlo, en preparar las cosas, que eso ha corrido quizás el lugar del dolor de lo que pasó en ese momento. Aparte si bien es triste para nosotros que Lely esté, que Lely está más feliz que todos nosotros juntos, para él sin duda es un nuevo, digamos, mucho mejor que estar acá.
Entonces también eso de reenfocarme, bueno, celebrar la vida y más debout y porque podrían no tenerlo, podría no tenerla.
[00:51:51] Speaker A: ¿Si vos tuvieras que darle un consejo o una palabra de ánimo a alguien que está atravesando un tiempo de vuelo, o si no lo está atravesando, que puede pasarle? Porque a todos nos puede pasar algo así, ¿Qué le dirías?
[00:52:06] Speaker C: Y en primer lugar correr a Cristo, o sea, si no tenés a Cristo, yo te diría que dejes de perder el tiempo en buscar otras cosas y busques a Dios porque él tiene esa posibilidad de sanarte, de restaurar, no es de un día para el otro, eso es claro, no es que es mágico, sino realmente donde vos buscas y la sanidad que produce ir hacia la verdad, porque muchos caminos te llevan a distintas cosas que no satisfacen, que no sanan, que siempre vuelven a lo mismo y Dios es tan certero, es tan justo, es tan intencional en esa sanidad que uno no pierde el tiempo.
Uno no pierde el tiempo y esto de no saltarse el dolor, bueno eso porque. Y porque no podemos, no tenemos el control ese que marque, bueno de alguna.
[00:53:01] Speaker B: Manera a veces se intenta anestesiarlo, abstraerte.
[00:53:07] Speaker C: O tomar algo, es cierto, está esa forma, pero es algo temporal, o sea que se termina y vuelve.
Entonces esto de allanar el camino que sobre, que ya es doloroso ver la manera de que sea más más lícita, más llevaderas e incluso en la rutina qué es lo que te facilita, qué es lo que te ayuda, juntarte con una persona, orar, pedir a alguien que por vos estar solo también son pequeñas cositas que uno necesita y tiene que hacerla y tiene que aprender a pasarlas.
[00:53:42] Speaker A: ¿Te quiero preguntar otra cosa, los que estamos afuera, que estamos acompañando una persona en el duelo, qué le dirías a esa persona también?
¿Cómo estuvo bueno que te ayudaran? Qué cosas quizás decís me quisieron ayudar pero al final no me ayudó tanto, no sé si te pasó, ¿Qué consejo también darías a los que acompañamos el duelo?
[00:54:08] Speaker C: Es re difícil acompañar alguien que pasa por dolor a veces, porque uno no sabe cómo y no se quiere. He recibido me acuerdo muchos mensajes diciéndome no te quiero invadir, no te quiero molestar, yo creo que siempre escuchando lo que la otra persona pide y lo que necesita en ese momento, muchas veces me ha pasado de decirme yo te hago esto, yo te hago lo otro, pero decir no, yo quiero hacerlo, yo necesito hacerlo, entonces bueno en eso quizás sí, escuchar y respetar lo que te está pidiendo el otro, eso me parece clave o incluso de estar a disposición si te dicen che hoy no pensé en la comida y acá te mando, ¿Entendés? Son esos pequeños detalles que ayudan en esto, pero clave de escuchar y accionar.
[00:55:02] Speaker B: A eso, a estar atentos, respetuosos, no.
[00:55:08] Speaker C: Algo que hacía la tercera me decía cómo te puedo ayudar hoy no le digo quiero estar sola y ella me ponía me parece fantástico que quieras estar sola y me hacía bien, ¿Entendés? Me hacía bien eso de respetar lo que yo estaba necesitando y animarme ahí esto también me decías de qué bueno que puedas decir lo que necesitas, qué bueno que puedas decir que querés estar sola.
[00:55:34] Speaker A: Es que creo que para la persona que realmente quiere ayudar no sirve que la otra persona te diga bueno dale venite a tomarnos mate y querés esta sola, realmente querés ayudar, o sea, si eso no va a ser de ayuda, no.
[00:55:47] Speaker B: Ya pensando en ir dándole un cierre.
Ese día, el 20 de julio fallece Lely. Pasa la eternidad con Cristo, pero algo más fallece ahí de vos decir ahí dejo el materialismo, algo más murió porque Dios nos dio una nueva vida, una nueva oportunidad para que te dé una nueva vida. Algo tenía que haber muerto.
[00:56:13] Speaker C: Exactamente. Y a ver, en ese momento quizás uno no ve esto de lo material por ejemplo, por así decirlo, pero sí vi que muchos sueños se fueron con él.
Algo que había escuchado en este proceso de duelo es que una de las peores pérdidas es cuando vos perdés a una persona que ocupaba muchos roles en tu vida y el, Eli, era una persona que ocupaba muchísimos roles en mí y por eso digo que no solamente dejé a un marido atrás, sino es a un amigo, un compañero de vida, porque es el que está todos los días con vos, el que te provee, el que te está ahí, el que te alienta, el que te ayuda cuando estás caído, muchas cosas, eso uno entierra, incluso esto de los sueños que es muy fuerte, uno deja atrás. Yo recuerdo que tenemos planes de agrandar la familia y de golpe decir no sea, vamos a hacer todo como planes que se supone que íbamos a hacerlo juntos, lo estoy disfrutando entre comillas sola.
Entonces eso fue como duro.
[00:57:20] Speaker B: Es muy peculiar que Lely, tan amiguero, tan amado por todos nosotros, tan querido, intenso como decía en las amistades porque era muy intencional y leal, allá falleció el 20 de julio.
Es muy particular eso.
Y vos Annie, que los acompañó de muy cerca, ¿Qué legado crees que él dejó a vos, a Bauti, que te gustaría transmitir y que esté grabado?
¿Qué legado dejó Lely?
[00:57:53] Speaker C: Y creo que lo principal que es la frase que Lely dijo mucho es esto de la milla extra, dejar la milla extra, dar incluso más de lo que tienes que hacer primero por Dios y segundo lugar por el otro también.
Por el otro.
Y no ver hoy esto porque también es algo que creo que hemos hablado mucho de Lely. No esperar que el otro haga lo mismo que yo, que no tenga el mismo compromiso, la misma actitud. Yo enfocarme realmente para quién lo estoy haciendo. Y esto de la milla extra para mí está impregnada de mí, lo tengo muy claro y es algo que también se lo quiero transmitir a Bauti darlo todo pero primeramente a Dios. Y Eli era una persona muy apasionada y todo lo que hacía le ponía mucha pasión. Y esto de la milla extra es parte de esa pasión porque eso es lo que lo lleva también a dar más de lo que uno cómodamente puede dar.
Y es eso. Entendiendo para quién, porque vale la pena.
Algo que también en este proceso de duelo y esta semana lo volví a reafirmar es que servir a Dios o correr a Dios vale la pena.
Vale la pena. Y yo muchas veces, quizás en sueños también que he tenido en este tiempo era decir Ani dale porque vale la pena.
Vale la pena servir a Dios, vale la pena correr a Dios, vale la pena buscar respuestas en Dios, vale la pena. No vamos a quedar a ver, uno dice uy pero serví a Dios y me pasó esto. Pero no se trata de nosotros esta vida, no se trata de lo que yo pueda lograr acá, sino de que sea el nombre de Dios exaltado, de que la gloria se la lleve el Señor.
Incluso en esto porque también la partida de Lely fue como una onda expansiva que llevó mucha gente a a repensar lo que Lely dejó en su ministerio, en lo que hizo, en cómo lo hizo. Esa pasión que puso quedó muy marcada. Incluso gente que ni siquiera sabíamos se acercaba y nos decía Lelia hizo esto en mi vida, marcó esto en mi vida, me llevó a esto, me hizo pensar en esto.
Era una persona muy Que te hacía pensar mucho. Entonces esas cosas realmente qué legado. Y el Delhi dejó eso, la milla extra, no para resaltar yo, sino primeramente por Dios y también por los que están a nuestro alrededor.
[01:00:33] Speaker A: Hay un texto de la Biblia que esta semana lo estuve pensando que es el que se leyó el día del velorio, el día del delorio Gerardo que fue el que tomó un pensamiento en este momento, nunca me lo voy a olvidar porque es como que él dijo algo que estaba en la mente de todos que él leyó un texto que está en Juan 16 22 23 que dijo que también vosotros ahora tenéis tristeza, pero os volveré a ver y se os hará vuestro corazón y nadie os quitará vuestro gozo. Esto lo dice Jesús.
Y en aquel día no me preguntaréis nada.
En otra versión va a decir así que ahora ustedes tienen tristeza, pero volveré a verlos. Y si, el texto dice ese día no necesitarán pedirme nada. Y realmente cuando Gerardo hablaba, que nos explicaba un poco este texto, a mí me impactaba con ustedes vosotros ahora tenéis tristeza y están llenos de preguntas. Y realmente, o sea, ese día fue un día de no entender nada, no de no entender y de tener la cabeza llena de preguntas, decir ¿Qué pasó? ¿Cómo pasó? ¿Por qué pasó? Pregunta, pregunta, pregunta, ¿Cómo se sigue esto?
Preguntas y de repente Jesús te dice en aquel día no me van a preguntar nada. Y nunca entendí tanto este texto hasta que fui comprendiendo que va a ser tan hermoso verlo a Cristo, Va a ser tan tremendo llegar y decir por esto que valió la pena esto que decís vos, valió la pena todo lo que viví en el mundo para ver a Jesús. Y sabes, quédate tranquilo, todo lo que te venía a preguntar, ya está, ya está, no quiero saber más nada, no me importa porque te tengo a vos, o sea, ya está. Por todo lo que viví, por todo lo que luché, por todo lo que quise que era por Cristo.
Se acaba de responder todo.
Y ese día esta palabra que dice también vosotros sé que tienen tristeza. Y el saber que Dios estaba leyendo nuestras mentes, cuando yo escuché este texto de verdad me acuerdo de lo que sentí de decir no, no puede ser que Dios en serio esté leyendo nuestras mentes, está viendo nuestra tristeza. Y el Señor consoló diciendo tranquilo, va a llegar un día donde ni siquiera van a tener preguntas para hacerme porque va a ser realmente tremendo lo que van a vivir en el cielo. Y para una persona que está en un tiempo de duelo, creo que algo sanador es la esperanza.
[01:03:19] Speaker C: Totalmente.
[01:03:19] Speaker A: Y los únicos que realmente tenemos esperanza es en Cristo.
Sabemos que Cristo vuelve a buscarnos, sabemos que falta poco, esperamos que esperemos que falta poco y nuestra esperanza está en Jesús y así se sale adelante Totalmente.
Sin esperanza realmente sería muy complicado.
Y lo vivimos cada día y seguimos. Hay días que realmente recordamos con dolor porque uno lo extraña, pero hasta esa esperanza.
Y realmente sabemos que esas preguntas se van a acabar cuando estemos en el cielo.
Ani, gracias.
Y quiero hacer un paréntesis antes de terminar, que me parece súper importante que este programa de mutación fue hablado mucho con el Edi también, el nombre, el diseño, che, se nos ocurrió esta idea, Eli, ¿Qué pensás? ¿Y para nosotros es muy especial, quién hubiese creído que estaríamos en este capítulo?
Pero realmente por más que haya lágrimas, hay mucha esperanza y nosotros sabemos que él está en un lugar donde está muy feliz, donde quiso estar toda su vida.
Así que también queremos, aunque él está en el cielo ya, queremos honrar, honrar también su participación en estos programas para que salga, para cuando, para cuando. Bueno, acá estamos.
Así que también queremos nombrar públicamente su participación en esto y gracias Aní, porque esto siempre fue a dos con ustedes.
[01:04:55] Speaker C: Gracias por invitarme.
[01:04:57] Speaker A: Muchas gracias.
[01:04:58] Speaker B: Dios les bendiga.
[01:05:00] Speaker A: Y en el próximo episodio.
Esto fue una producción de la Iglesia Encuentro con Dios ubicada en Malvinas Argentinas, Córdoba capital. Si te gustó este episodio nos encontramos en Instagram como Muta Sión para que nos escribas y conozcas a los protagonistas.